LA POESIA DE EDUARDO APODACA
  Giacomo Leopardi
 

http://digilander.libero.it/interactivearchive/leopardi_passero.htm

EL GORRIÓN SOLITARIO

Desde la cima de la antigua torre,
solitario gorrión, hacia los campos
cantando vas hasta que muere el día;
y la armonía corre por el valle.
La primavera en torno
brilla en el aire y en el campo exulta,
tal que al mirarla el alma se enternece.
Escuchas los balidos, los mugidos;
las otras aves juntas, compitiendo
dan alegres mil vueltas por el cielo
libre, y celebran su estación mejor:
tú ajeno y pensativo miras todo;
sin volar, sin amigos,
del juego huyendo y sin cuidar del gozo;
cantas, y así atraviesas
la flor más bella de tu edad y el tiempo.

¡Oh cuánto se parecen
nuestras costumbres! Risas y solaces,
dulce familia de la edad temprana,
ni a ti, amor, de los jóvenes hermano,
suspiro acerbo de provectos días,
busco, no sé por qué; y es más, de ellos
casi a lo lejos huyo;
casi solo, y extraño
a mi lugar natal,
paso de mi vivir la primavera.
Este día que ahora ya anochece,
celebrar se acostumbra en nuestra villa.
Se oye el son de una esquila en el sereno,
se oyen férreos cañones a lo lejos,
atronadores de una aldea en otra.
Toda la juventud
con los trajes de fiesta
deja las casas, corre por las calles;
y mira y es mirada, y su alma ríe.
Yo saliendo a los campos
en soledad por tan remota parte,
todo deleite y juego
para otro tiempo dejo; y al tender
la vista al aire ardiente,
me hiere el sol, que tras lejanos montes
se disipa al caer, como diciendo
que la dichosa juventud desmaya.

Cuando a la noche llegues, solitario,
del vivir que los astros te concedan,
en verdad tu conducta
no llorarás; pues da naturaleza
todos vuestros anhelos.
A mí, si el detestado
umbral de la vejez
evitar no consigo,
cuando mudos mis ojos a otros pechos,
ya ellos vacío el mundo, y el mañana
más tétrico y tedioso que el hoy sea,
¿qué me parecerá de tal deseo?
¿y qué estos años míos? ¿Qué yo mismo?
¡Ay, me arrepentiré, y frecuentemente
hacia atrás miraré, mas sin consuelo!

Giacomo Leopardi (Traducido por Antonio Colinas)

Il passero solitario

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  • D'in su la vetta della torre antica,
    Passero solitario, alla campagna
    Cantando vai finchè non more il giorno;
    Ed erra l'armonia per questa valle.
    Primavera dintorno
    Brilla nell'aria, e per li campi esulta,
    Sì ch'a mirarla intenerisce il core.
    Odi greggi belar, muggire armenti;
    Gli altri augelli contenti, a gara insieme
    Per lo libero ciel fan mille giri,
    Pur festeggiando il lor tempo migliore:
    Tu pensoso in disparte il tutto miri;
    Non compagni, non voli
    Non ti cal d'allegria, schivi gli spassi;
    Canti, e così trapassi
    Dell'anno e di tua vita il più bel fiore.
    Oimè, quanto somiglia
    Al tuo costume il mio! Sollazzo e riso,
    Della novella età dolce famiglia,
    E te german di giovinezza, amore,
    Sospiro acerbo de' provetti giorni,
    Non curo, io non so come; anzi da loro
    Quasi fuggo lontano;
    Quasi romito, e strano
    Al mio loco natio, 
    Passo del viver mio la primavera.
    Questo giorno ch'omai cede alla sera,
    Festeggiar si costuma al nostro borgo.
    Odi per lo sereno un suon di squilla,
    Odi spesso un tonar di ferree canne,
    Che rimbomba lontan di villa in villa.
    Tutta vestita a festa
    La gioventù del loco
    Lascia le case, e per le vie si spande;
    E mira ed è mirata, e in cor s'allegra.
    Io solitario in questa
    Rimota parte alla campagna uscendo,
    Ogni diletto e gioco
    Indugio in altro tempo: e intanto il guardo
    Steso nell'aria aprica
    Mi fere il Sol che tra lontani monti,
    Dopo il giorno sereno,
    Cadendo si dilegua, e par che dica
    Che la beata gioventù vien meno.
    Tu, solingo augellin, venuto a sera
    Del viver che daranno a te le stelle,
    Certo del tuo costume
    Non ti dorrai; che di natura è frutto
    Ogni vostra vaghezza.
    A me, se di vecchiezza
    La detestata soglia
    Evitar non impetro,
    Quando muti questi occhi all'altrui core,
    E lor fia vóto il mondo, e il dì futuro
    Del dì presente più noioso e tetro,
    Che parrà di tal voglia?
    Che di quest'anni miei? che di me stesso?
    Ahi pentirornmi, e spesso,
    Ma sconsolato, volgerommi indietro.


    http://www.youtube.com/v/zWMDBhqgpas&hl=en

    L’INFINITO

     

    Sempre caro mi fu quest’ermo colle, 
    E questa siepe, che da tanta parte

     Dell’ultimo orizzonte il guardo esclude.

    Ma sedendo e mirando, interminati

     Spazi di là da quella, e sovrumani

    Silenzi, e profondissima quiete

     Io nel pensier mi fingo; ove per poco

    Il cor non si spaura. E come il vento

     Odo stormir tra queste piante, io quello

    Infinito silenzio a questa voce

     Vo comparando: e mi sovvien l’eterno,

    E le morte stagioni, e la presente

     E viva, e il suon di lei. Così tra questa

    Immensità s’annega il pensier mio:

     E il naufragar m’è dolce in questo mare.




    L'infinito recitado en italiano
    http://www.youtube.com/v/RuBVTXqaCPU&hl=en

    EL INFINITO

    Amé siempre esta colina,
    y el cerco que me impide ver
    más allá del horizonte.
    Mirando a lo lejos los espacios ilimitados,
    los sobrehumanos silencios y su profunda quietud,
    me encuentro con mis pensamientos,
    y mi corazón no se asusta.
    Escucho los silbidos del viento sobre los campos,
    y en medio del infinito silencio tanteo mi voz:
    me subyuga lo eterno, las estaciones muertas,
    la realidad presente y todos sus sonidos.
    Así, a través de esta inmensidad se ahoga mi pensamiento:
    y naufrago dulcemente en este mar.

    Versión de Carlos López S.



    CANTO XII   . El infinito

    Siempre querido me fue este yermo cerro
    y este cerco que tanta parte
    a la mirada excluye del último horizonte.
    Mas, sentado y mirando interminables
    espacios de allá lejos, sobrehumanos
    silencios y su hondísima quietud,
    me quedo ensimismado hasta que casi
    el corazón no teme. Y como el viento
    cuyo tráfago escucho entre las hojas, a este
    silencio sin fin esta voz
    voy comparando, y pienso en lo eterno
    y en las muertas estaciones y en la viva presente,
    y sus sonidos. Así a través de esta
    inmensidad se anega el pensamiento mío;
    y naufragar en este mar me es dulce.

    Versión de L.S.

    http://es.geocities.com/ainsa2004/poemas/anto.html

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